El uso láseres para podología tiene siempre la finalidad de reducir el dolor del tratamiento, evitar o minimizar la hospitalización y permitir que los pacientes puedan realizar sus actividades cómodamente lo antes posible.
Onicomicosis significa infección fúngica de la uña. Es la enfermedad más común de las uñas y constituye aproximadamente la mitad de todas las anomalías de las uñas. Esta condición puede afectar las uñas de los pies o de las manos. Se estima que afecta a casi el 10% de la población general, con una incidencia que aumenta a casi el 30% en pacientes mayores de 60 años.
Con solo una eficacia parcial y varios efectos secundarios de las opciones farmacéuticas, el tratamiento con láser se está convirtiendo rápidamente en la opción preferida para la erradicación de hongos en las uñas. El láser de longitud de onda de 980nm/1064nm ha demostrado resultados superiores en la eliminación de hongos en las uñas, demostrando seguridad y eficacia. Brinda excelentes resultados con una penetración profunda, asegurando un tratamiento efectivo a través de la uña, sin impactar otras estructuras circundantes.
Durante el procedimiento, se atacan los patógenos que causan los hongos en las uñas de los pies, lo que permite que la nueva uña crezca sana y clara. A diferencia de algunos tratamientos basados en medicamentos para los hongos en las uñas de los pies, el láser no presenta efectos secundarios y es una gran alternativa para muchos pacientes que no pueden o no quieren tomar medicamentos orales. Es completamente seguro sin dolor.
El resultado del tratamiento se puede alcanzar en una sesión única o doble, pero depende de la gravedad de la infección por hongos. El resultado es el crecimiento de nuevas estructuras ungueales transparentes, por lo tanto, no es visible de inmediato. Sin embargo, en aproximadamente 6 a 8 semanas después del tratamiento inicial, las primeras estructuras ungueales transparentes recién formadas son discernibles. Si este no es el caso, se podría implementar un tratamiento adicional. Podría ser necesario un 3er tratamiento (aprox. 6 – 8 semanas después del 2º tratamiento) si la infección fúngica es muy definitiva. El resultado final debe ser visible en 9 meses hasta un año.
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